Europa sufre el mayor impacto del cambio climático en los viñedos

Un grupo internacional de científicos ha publicado un estudio que analiza el impacto del cambio climático en los viñedos de todo el mundo. El trabajo, que aparece en la revista estadounidense PLOS Climate, señala que Europa es la región vitivinícola más afectada hasta ahora. Los investigadores han cruzado datos climáticos y biológicos de más de 500 variedades de uva para comparar cómo afectan los cambios de temperatura y las olas de calor a las distintas zonas productoras.

El estudio recoge información sobre el clima en momentos clave del ciclo de la vid, como la floración, la brotación y el periodo previo a la vendimia. Los resultados muestran que Europa ha experimentado un aumento importante en el número de días con temperaturas superiores a 35 grados centígrados. Además, las temperaturas más altas se registran durante la fase de maduración de la uva, lo que influye directamente en la calidad y las características del vino.

En América del Norte, los aumentos tanto en las temperaturas medias como en las extremas han sido más moderados. En América del Sur, los datos reflejan una situación parecida a la europea en cuanto a temperaturas medias, pero con menos episodios de calor extremo. El equipo responsable del estudio está formado por climatólogos, agrónomos, ecólogos y expertos en genética de la vid procedentes de Francia, España, Estados Unidos y Canadá. Para su análisis han utilizado registros históricos recogidos durante décadas por el Domaine de Vassal, una unidad experimental gestionada por el instituto francés Inrae.

En otras regiones donde ya se alcanzaban temperaturas muy altas antes del actual calentamiento, como África del Norte o Australia, los efectos también son graves. En estos lugares se producen incendios y otros problemas relacionados con el calor, aunque el aumento térmico no sea tan acusado como en Europa.

El informe subraya que el principal problema para los viñedos es el incremento de las temperaturas máximas. Este fenómeno tiene más peso que el aumento de las mínimas o la aparición ocasional de episodios fríos fuera de temporada. La vid es una planta muy sensible al clima y ya se observan consecuencias directas: las vendimias se adelantan cada vez más, los vinos presentan un mayor contenido de azúcar y surgen nuevas zonas aptas para el cultivo.

E.M. Wolkovich, investigador principal del estudio y profesor en la Universidad de British Columbia (Canadá), explica que le ha sorprendido el nivel de calentamiento registrado a escala mundial y especialmente en Europa. Wolkovich afirma que tras visitar Europa durante más de quince años ha podido comprobar cómo aumentan las olas de calor. Sin embargo, asegura que los datos recopilados muestran una magnitud del cambio superior a lo esperado y considera que esta situación plantea serias cuestiones para los productores.

El trabajo concluye que todas las regiones vitivinícolas sufren los efectos del cambio climático, pero Europa soporta los cambios más intensos hasta ahora documentados. Los autores señalan que será necesario adaptar las prácticas agrícolas y buscar soluciones para mantener la producción y la calidad del vino ante este nuevo escenario climático.
(vinetur.com)