Ventas del sector vitivinícola caerán hasta 30% este año

Luego de un difícil arranque de año —donde la exportación de vino nacional se vio afectada en el mercado chino por el covid-19—, la industria vitivinícola vuelve a ser golpeada con la propagación del virus a nivel mundial.

El año pasado no fue bueno para la industria nacional del vino —los envíos internacionales cayeron un 4,4% en valor y un 3,7% en volumen—, pero las expectativas estaban puestas en 2020.

Según Aurelio Montes, presidente de la asociación gremial Vinos de Chile, las ventas del sector caerán entre un 20% y un 30% este año a causa del coronavirus. “Es un golpe fuertísimo, hay que sobrevivir este bache y esperar que no se extienda por más de tres meses, como dicen los doctores, porque esto te deja una herida muy profunda”, señala.

Montes manifestó que en Europa los compradores de vino están “muy cautos” y con mucho stock, principalmente por la caída en el consumo en lugares como restaurantes y hoteles. Mientras que ve con incertidumbre lo que pueda pasar en la región, donde la expansión de la enfermedad está en su etapa inicial y no se sabe con certeza por cuánto tiempo permanezca. “Es muy difícil hacer proyecciones, porque esto es algo del día a día”, afirmó.

En China —que concentra un 16,5% de los envíos de vino nacional—, la situación se está comenzando a reactivar tras un complicado inicio de año y los distribuidores en ese país están volviendo a hacer pedidos, aseguró.

Por ahora, el presidente de Vinos de Chile dijo que se están enfocando en el Sudeste Asiático, una zona que según Montes está “más libre” del coronavirus y que exhibe cierta actividad turística.

Aurelio Montes contó que, debido a que están en medio de la vendimia, desde el sector han estado en conversaciones con los ministerios de Salud y Agricultura para continuar con la cosecha. Estos, dijo, aseguraron que podían continuar con sus labores, siempre que se tomen las medidas de seguridad e higiene de los trabajadores.

“Había un temor, pero nos prometieron que las cadenas alimenticias no se iban a parar, como los packings, las bodegas y los frigoríficos. Con eso tenemos una cierta tranquilidad en que, por lo menos, vamos a poder continuar con esas labores”, señaló. “Tenemos que terminar la cosecha y recuperar los mercados, pero hay viñas, quizás las más chicas, que probablemente les va a costar mucho superar esta crisis”, dijo.

El presidente gremial no escondió su preocupación en torno a lo que pueda suceder este año en el sector vitivinícola nacional. Explicó que habrá firmas que tendrán un panorama más complejo que otras, dependiendo de sus mercados de exportación y su tamaño. “Sabemos que es un año tremendamente difícil y la esperanza está en que Asia vuelva lo más rápido posible a la normalidad. Pero, ciertamente, las tasas de crecimiento y de utilidades de las viñas se van a caer”, agregó.
(El Mercurio)