Cada vez más consumidores chinos beben vinos chilenos

vinoclEn los últimos años, cada día más consumidores chinos adquieren vinos chilenos. De acuerdo con el análisis de los datos ofrecidos por Tmall, una plataforma internacional de comercio electrónico de China, la tasa de crecimiento de la cuota de los vinos chilenos en este mercado en línea superó considerablemente a la de los caldos galos. El vino chileno ocupó al cuarto puesto, después de los procedentes de Francia, España y Australia, y por delante de los de Italia y Argentina.

Las cifras del Banco Central de Chile confirman este ascenso. El volumen de las exportaciones de caldos chilenos a China era de en torno a US$82 millones en 2012. En 2015 esta cifra se duplicó y llegó a US$165 millones.

«El año pasado fue un año realmente exitoso en cuanto a las importaciones de vino chileno al país asiático. Poco a poco, China está formando un mercado cada día más importante para el vino chileno. Antes, nosotros casi no exportábamos vino a China. En 2006, sólo vendimos cinco millones de dólares. Hemos dado un salto enorme», indicó Andreas Pierotic, agregado comercial de la Embajada de Chile en China.

Gracias a las condiciones geográficas y climáticas, así como al apoyo de la educación y capacitación, Chile se ha convertido en una potencia vitivinícola, pero, debido a un mercado interno pequeño, su vocación ha sido exportadora.

«El vino es nuestro producto ‘embajador’ en el mundo, que refleja la imagen de Chile. El caldo chileno consigo atraer la atención de los consumidores de otros países hacia otros productos chilenos, como las cerezas y los arándanos», expresó Pierotic.

Actualmente, en Chile hay alrededor de 270 viñas que están exportando al mundo.

«Tenemos una producción muy importante que ha ido aumentando, y tenemos que venderla en el exterior. China ha sido un país en donde el vino es cada vez más popular», añadió Pierotic.

El año pasado había 209 viñas chilenas exportando al mercado chino. En cambio, hacia Estados Unidos sólo se contaron 175 viñas. China se ha convertido en el mercado del mundo al que más viñas chilenas están mandando sus productos.

Cambios del mercado chino

«Durante los últimos diez años, tras el florecimiento del vino importado en China, este mercado ha experimentado grandes cambios», recordó Li Zhishuo, presidente de la empresa china Wine Platform.

Por otro lado, el rápido desarrollo del comercio electrónico en el mercado chino también contribuyó a la entrada del vino chileno.

En la tercera edición del Festival Internacional de Vinos celebrado en la plataforma de comercio electrónico JD.com, la tienda Provilion of Chilean Wines, apoyada directamente por la Embajada de Chile en China y el Consulado de Chile en Shanghai, se encontró en la lista de las tiendas favoritas seleccionadas por los consumidores.

Tras la firma del tratado de libre comercio entre China y Chile en 2005, el gobierno chino otorgó el tratamiento de tarifa baja a los vinos importados de Chile, por lo que el precio bajo se sumó a las ventajas de los caldos chilenos respecto a sus competidores en el mercado chino.

Desafíos duros

Con el cambio de actitud de los consumidores chinos, y la entrada constante de caldos de otros países del Nuevo Mundo, tales como Australia, Argentina y Sudáfrica, la competencia en el mercado chino se ha vuelto cada vez más feroz. Para lograr más desarrollo, el vino chileno todavía se enfrenta a muchos desafíos.

De acuerdo con los datos proporcionados por la embajada de Chile, el vino chileno supuso 9,1% de todos los caldos importados en China en 2015, ocupando el tercer lugar tras Francia y Australia, que abarcaron el 46,2% y el 23,4%, respectivamente.

De ahí que la participación del vino chileno en China todavía sea muy baja pese a su alta velocidad de crecimiento. Pierotic atribuyó ese problema principalmente a la falta de promociones.

«Según nuestros estudios, el consumidor chino que compra una botella de vino chileno vuelve a adquirir un caldo chileno. Lo difícil es hacer que esa persona elija por primera vez nuestro vino, ya que tiene la idea del vino francés», señaló el agregado comercial, añadiendo que se necesitan más promociones con miras a establecer una buena imagen.

La calidad es otra duda para los chinos. «Cabernet Sauvignon y Carmenere son unas de las cepas más plantadas en Chile. Algunas de ellas son de muy alta calidad, pero debido a la enorme variedad de uvas cultivadas, la calidad es desigual», apuntó el señor Cheng, sumiller de Wine & Spirit Trust, una organización británica de vinos y licores.

A pesar de que China se ha convertido en un gran consumidor de vino, para el pueblo chino, que históricamente ha preferido el aguardiente, la cultura occidental del vino tinto sigue siendo un poco desconocida. La diferencia entre las culturas pone obstáculos a la popularización del vino chileno.

Cuando una botella de vino chileno, con el abundante sol del hemisferio austral, llega a una familia china tras un largo viaje, trae a los consumidores chinos no sólo una experiencia fantástica de sabor, sino también un mensaje amistoso y cultural, que hace que los chinos empiecen a lanzar sus miradas al país remoto en el otro punto de la Tierra.
(AmericaEconomía)