Los expertos en vino perciben los sabores según su cultura

Al calificar una botella de vino, los expertos buscarán cosas como el color y la translucidez. Incluso podrían mirar las “piernas”, observando cómo el líquido corre por el lado del vaso. Sin embargo, según un estudio reciente, es posible que también quieran ver sus propias piernas —como literalmente en donde están parados— porque el origen de un experto en vinos puede alterar la forma en que percibe el vino en comparación con los expertos de otras áreas.

El estudio, dirigido por Bianca Grohmann en la Universidad Concordia de Montreal, observó a 22 expertos en vino ubicados en dos regiones distintas de Canadá a una distancia de casi 4,000 kilómetros: la mitad eran del valle de Okanagan en la Columbia Británica y la otra mitad de Montreal, Quebec.

En el transcurso de una cata a ciegas de 60 minutos, cada grupo evaluó las mismas siete botellas de vino (un merlot, un pinot, un shiraz y cuatro mezclas de tinto), calificándolas con siete atributos de aroma y nueve atributos de sabor. Curiosamente, aunque ambos grupos eran expertos entrenados, los hallazgos difirieron significativamente.

“Descubrimos una situación de problemas de comunicación entre los expertos de raíces francesas y de raíces americanas”, explicó Grohmann. “Los profesionales del vino en Columbia Británica se inclinan hacia el modelo educativo del Reino Unido —una certificación llamada Wine and Spirit Education Trust [mientras que] el panel de expertos de Quebec tiene la tradición de los sommeliers y periodistas franceses sobre el vino. Estos diferentes antecedentes educativos y contextos socioculturales se muestran como factores importantes de influencia”.

Específicamente, el contingente de Montreal detectó más acidez, amargura, roble, especias, pimiento verde, balance, vegetal y sabores “apagados”. En general, preferían los vinos equilibrados, pero también eran más indulgentes cuando detectaban defectos. Mientras tanto, el grupo de Okanagan prefirió los aromas especiados y calificó a estos vinos más alto. Otro hallazgo extraño fue que los grupos notaron fuertes aromas a bayas pero en vinos completamente diferentes.

Podrías estar familiarizado con uno de los vinos que arrojó las opiniones más diferentes: un Apothic Red de 2015. “En particular, esa botella de tinto es interesante porque está diseñada para transmitir un buen equilibrio y sabor, en lugar de ser un vino de viñedo puro”, dijo Grohmann, señalando que el Apothic Red podría señalar un desacuerdo entre los dos orígenes de los expertos del Viejo Mundo contra el Nuevo Mundo.

“Esto tiene implicaciones para el público en general porque los consumidores no deben pensar que los expertos en vinos tienen una sola voz, sino que son distintos e influenciados por su ubicación y tradición”, concluyó.
(foodandwine.com)