INIA crea bioplaguicida para controlar la polilla de la vid

Especialistas del Instituto de Investigaciones Agropecuarias (INIA) han creado un bioplaguicida en base a hongos entomopatógenos cuyo principal atributo es su carácter sustentable que permite el combate y manejo integrado de la Lobesia botrana o polilla de la vid, inciativa que se enmarca en el programa de control de esta plaga que ataca a las vides establecido por el Servicio Agrícola y Ganadero (SAG).

Este proyecto tiene por objetivo controlar biológicamente la plaga de Lobesia botrana en un contexto de cambio climático, a través de una estrategia de dos etapas. La primera consiste en el desarrollo de un biopesticida formulado en base a hongos entomopatógenos nativos de los géneros Beauveria sp. y Metarhizium sp. en matrices que permitan la viabilidad, especificidad y efectividad de los hongos en sus aplicaciones en vides de zonas urbanas y productivas del país. La segunda etapa es la transferencia tecnológica y cultural del uso de biopesticidas a los residentes de centros urbanos, junto a pequeños y grandes productores para manejar y controlar la plaga.

Eduardo Tapia, investigador de INIA La Platina y director del proyecto, valoró esta esta nueva alternativa de producto amigable, biológico y que permitirá un buen control de la Lobesia botrana. “La idea nace de la necesidad de hacer una agricultura más sustentable. Diferentes investigadores de INIA nos juntamos y pensamos cómo abordar este problema. Se llevaron a cabo distintas estrategias, técnicas y conocimientos y de ese trabajo en conjunto surgió este bioproducto. Los beneficios de este bioplaguicida parten desde atacar focos urbanos, que no son bien manejados por lo general, hasta trabajar con productos ecoamigables, lo que disminuye las posibilidades de lastimar a los aplicadores en los predios. En consecuencia, el consumidor final estaría adquiriendo un producto con una carga química mucho menor, lo que se traduce en una alimentación inocua”, sostiene Eduardo tapia.

Asimismo, el investigador aprovechó de anunciar cuándo estará disponible este producto, ya sea para uso agrícola o doméstico. “Queremos transmitirle al agricultor y a la dueña de casa que no tenga miedo de probar estas nuevas alternativas. Estamos trabajando para que este producto sea compatible con su manejo y lo pueda ocupar cualquier persona. Seguramente, lo podrán adquirir en la próxima temporada, ya que estamos en una etapa experimental todavía. Por ahora, lo vamos a suministrar gratuitamente dentro de nuestras unidades experimentales y más adelante INIA lo va a licitar a algún productor de bioinsumos para que sea accesible a todas las personas”, agrega.

Ángel Sartori, Director Nacional de SAG, destacó los avances en el programa de control de la Lobesia botrana que su institución encabeza, y en especial el desarrollo de nuevos productos que vayan en ayuda del medio ambiente. “El trabajo que está haciendo INIA, FIA y el SAG en este proyecto tiene la máxima importancia. Esta es una plaga que puede representar regulaciones al comercio de nuestra fruta y lo que hemos logrado hasta la fecha son resultados bastante auspiciosos. Esto es un trabajo adicional a lo que ya estamos haciendo con el uso de los confusores sexuales y el trabajo con la técnica del insecto estéril. Cada día hay más preocupación de parte de los consumidores hacia el uso de agroquímicos, por lo tanto encontrar un producto amigable con el medio ambiente tiene doble propósito para controlar la plaga y sin contaminar”, afirmó el Director Nacional de SAG.

La Lobesia botrana es una plaga que afecta principalmente las producciones de uva. Sin embargo ya se ha constatado su presencia en otras especies frutícolas destinadas a la exportación y la agroindustria. Durante el mes de septiembre comienza el primer vuelo de la polilla, los programas químicos de manejo de la Lobesia botrana en el país. El desarrollo e implementación de este proyecto se basa en la colaboración integrativa y transversal de distintas disciplinas de INIA, como Biotecnología, Entomología y Transferencia Tecnológica, junto con el apoyo y experiencia del SAG en el control de Lobesia botrana.
(inia.cl)