J.M. Boursiquot: La importancia de estudiar y preservar las viejas parras

La preservación de viejas parras es algo de primera importancia para legar a las generaciones futuras, y así evitar que variedades de viñas únicas desaparezcan para siempre en el mundo, sea por enfermedades, la acción del hombre, el cambio climático e incendios.

Así lo afirmó el ampelógrafo francés Jean Michel Boursiquot en conferencia que ofreció a viñateros, enólogos e investigadores en las dependencias del lNIA Cauquenes.

Boursiquot señaló que en Chile existen una serie de variedades «criollas» que es fundamental preservar por la originalidad y especificidad de las mismas, cuya existencia además va en contrapeso de la estandarización en la industria vitivinícola, ofreciendo una diferencia importante que se puede traducir en nuevos nichos de mercado que hoy buscan vinos diferentes, con identidad e historia.

La conservación de las variedades de vitis vinífera más viejas es fundamental también para mantener la diversidad de especies, evitando la desaparición definitiva a futuro, y también sirve para enfrentar el cambio climático y nuevas enfermedades de la vid, sostuvo Boursiquot.

En su conferencia, el ampelógrafo redescubridor de la cepa Carmenere en Chile en 1994, explicó detalladamente el trabajo de preservación de especies que se realiza en Francia, a través de los estudios de especialistas de instituciones como el INRA y el IFV.

El proceso de preservación de las especies de vitis vinífera se realiza con la conservación de los viñedos, identificación e individualización de genotipos. Los reservorios también incluyen mantener y cultivar viñedos de esas especies, explicó el especialista francés.

Boursiquot señaló que en Chile la preservación clonal de las especies de vitis vinífera, sobre todo de las viejas parras, debería ser una prioridad, principalmente de la uva País, para evitar que esta especie desaparezca en el futuro.

La uva País chilena ha sufrido mutaciones desde la llegada de su «matriz» original en el siglo XVI, junto a los conquistadores españoles que la conocían como uva Listan Prieto, y cuyo origen sería el norte de África (Marruecos), donde se le conoce como Hariri.

Añadió que este trabajo de conservación y estudio de selección clonal de las especies de vides en Chile, debe arrojar muchas sorpresas, pues se podrían encontrar especificidades raras porque las viñas aquí no fueron afectadas por la filoxera y han sido introducidas en el país hace mucho tiempo.

Boursiquot destacó la gran cantidad de parras viejas que existen en Chile y que representan una gran diversidad que debe ser objeto de estudio, identificación y preservación para generaciones futuras. Mientras en Chile existen alrededor de 11.000 hectáreas de parras viejas de uva País con más de 80 años de vida, en Francia sólo existe un viñedo pre filoxera. Es una viña de 0,2 hectáreas que ha sido declarada monumento histórico y el actual propietario, René Pederbernade, de 85 años, afirma que está en la familia desde 1830.

Hay que preservar el patrimonio genético de la vitivincultura. Esto debería ser una prioridad para todos los actores de la industria y también del Ministerio de Agricultura, impulsando la realización de un catastro de todas las variedades, en especial de las viejas parras, dijo Jean Michel Boursiquot.

Tras la conferencia del ampelógrafo francés, especialistas chilenos dieron a conocer algunas iniciativas que se desarrollan para estudiar, seleccionar y conservar el material genético de las especies de vitis vinífera en el país, las cuales aún son muy pocas pero ya existen algunos proyectos en curso como lo mencionó Patricio Hinrichsen, del INIA La Platina, que se refirió al estudio que desarrollaron en el norte del país y el campo experimental de 0,3 hectáreas en Hualañé; Patricio Parra del consorcio I+D de la asociación gremial Vinos de Chile, abordó el estudio que llevan adelante que ya alcanza 90 variedades y que busca formar un banco de germoplasma; y representantes de las viñas Miguel Torres y Santa Carolina, que se refirieron a sus proyectos Cepas Ancestrales y Bloque Herencia, respectivamente.

(Alejandro Tumayan – todovinos.cl)